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La vivienda sostenible, una realidad cada vez más cercana

El coronavirus ha llevado a millones de personas a trabajar desde casa. Este hecho nos ha descubierto diversas deficiencias existentes en materia de vivienda en nuestro país que precisan de una solución, como es el caso del ahorro energético y tener una vivienda sostenible.

Actualmente, los edificios son responsables del 39% de todas las emisiones de carbono en el mundo.

Así lo asegura el World Green Building Council, una red global de organizaciones que operan en la industria de la construcción.

Por ello, y ante un mundo cada vez más sostenible, es necesario pensar en nuevos modelos de edificación y plantear rehabilitaciones de calado en los inmuebles ya existentes.

Ciudades más ecológicas

Según datos de la Organización de Naciones Unidas, las ciudades del mundo ocupan apenas el 2% del planeta, pero representan entre el 80% y el 60% del consumo de energía, así como un 75% de las emisiones de carbono.

Estos datos resaltan la importancia de establecer políticas y planes para promover el uso eficiente de los recursos y mitigar el cambio climático en las ciudades.

Precisamente, por este motivo, en España existe la Agenda Urbana Española, un documento estratégico del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana que propone transformar el parque inmobiliario español en uno:

“con alta eficiencia energética y descarbonizado antes del año 2050, facilitando la transformación económicamente rentable de los edificios existentes, en edificios de consumo de energía casi nulo”.

Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana

El director del gabinete técnico del Colegio de Aparejadores de Madrid, Francisco Javier Méndez, explica que “los requisitos mínimos que deberán satisfacer los edificios de consumo casi nulo serán los que en su momento se determinen en el Código Técnico de la Edificación”.

Vivienda sostenible y ecológica

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Sin embargo, el 90% del parque de viviendas en España se levantó con anterioridad a la entrada en vigor del código, aprobado en 2006.

Un 60% de los inmuebles se construyó sin aislamiento térmico, ya que entonces no existía ninguna normativa sobre la eficiencia energética.

Por ello, muchos de los esfuerzos para mejorar en el ámbito de la sostenibilidad se basan en la rehabilitación de vivienda. De hecho, esta semana el Gobierno ha destinado 5.800 millones de euros de los fondos europeos al plan de eficiencia energética de los edificios y pagará hasta el 100% de dichas rehabilitaciones.

Las viviendas sostenibles del futuro

Una vez tomamos conciencia de la necesidad de rehabilitar las viviendas y crear un nuevo parque de carácter sostenible, la siguiente pregunta que surge es: ¿qué características tendrían este tipo de inmuebles?

Algunos apuestan por un nuevo modelo de vivienda sostenible cooperativa, como es el caso de “Entrepatios”.

En este proyecto de vivienda colaborativa, un grupo de personas forma una cooperativa, paga una entrada para formar parte de ella y adquiere un solar para construir una vivienda de la cuál son propietarios.

En estos edificios existen espacios comunes para ahorrar energía, como una guardería, una lavandería y una sala de coworking.

Cambios en vecindarios y vivienda sostenible

La particularidad de este modelo es que la casa se mantiene en propiedad mientras se usa, por lo que si una persona se marcha de la vivienda, esta deja de ser de su propiedad y se devuelve la inversión.

Otros defienden la necesidad de cambiar la manera de edificar de nuestro país.

“El sector inmobiliario y el de la construcción suman unas emisiones muy altas, consumen muchas materias primas y generan muchos residuos”, señala Jesús Bayarri, director de un proyecto que pretende crear el primer vecindario completamente sostenible de España.

Cabe destacar que, a pesar de que actualmente existe un sobrecoste de entre el 8% y el 18% en la construcción de viviendas sostenibles, su inversión se suele amortizar en unos cinco años a través del ahorro que se consigue en la factura energética.

Según Breeam, un organismo certificador internacional, un edificio en cuyo diseño y construcción se han tenido en cuenta criterios de sostenibilidad, permite:

  • Disminuir el consumo energético entre el 50% y el 70%.
  • Reducir el gasto de agua, entre un 20% y un 35%.
  • Rebajar las emisiones de CO2, un 7% como mínimo.

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