La aerotermia revolucionará nuestros hogares. Esta tecnología de climatización cuenta con el potencial de ahorrar hasta un 70% en el consumo energético de la vivienda, lo supone un importante avance para paliar el efecto invernadero que producen otros sistemas de refrigeración y calefacción.
Esta tecnología es fruto de una mayor concienciación respecto al cambio climático por parte de empresas y consumidores.
Actualmente existe una mayor demanda de tecnologías eficientes en la utilización y aprovechamiento de la energía.
En este sentido, el sector inmobiliario es uno de los principales interesados en el ahorro del consumo energético en la vivienda.
El consumo energético en la vivienda en España
Para poner en contexto la importancia en la reducción del consumo energético en la vivienda, cabe exponer algunos datos.
En España, según el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), el consumo energético medio utilizado en el hogar para la calefacción y el agua caliente sanitaria es del 65,9% del total.
Asimismo, según datos de la Comisión Europea, el 40% del consumo energético total europeo proviene de edificios de viviendas; el 50% de este lo generan equipos de calefacción y refrigeración.
La COP 25 apuesta por el cambio del sector inmobiliario para frenar el cambio climático
A propósito de la celebración de la COP 25 en Madrid, del 2 al 13 de diciembre, los expertos recuerdan que el sector inmobiliario y, en concreto, las empresas de edificación, puede contribuir en gran medida a frenar las consecuencias del cambio climático.
Como expone el secretario general de la fundación ASPRIMA, Daniel Cuervo, “el reto prioritario del sector inmobiliario es adoptar las medidas en materia de sostenibilidad más innovadoras del mercado”.
Por este motivo, las grandes empresas industriales realizan mayores inversiones en desarrollar tecnologías sostenibles y eficientes en el ámbito energético para aportar soluciones en el sector de la vivienda.
El consumo energético en la vivienda y la aerotermia
Aspectos técnicos de la aerotermia
Esta tecnología puede proporcionar temperaturas de entre 18ºC y 35ºC, por lo que con un mismo aparato es posible enfriar las estancias en verano y calentarlas en invierno.
Para el uso de este sistema no importa la sensación térmica que se sienta en el exterior de la vivienda.
La aerotermia consiste en extraer el máximo de energía térmica disponible en el exterior de un edificio y traspasarla al interior de este, ya sea en forma de calor (calefacción) o en frío (aire acondicionado).
El concepto de olla exprés
Para ello se utiliza un concepto parecido al de la olla exprés.
En una olla exprés se utiliza el calor para aumentar la presión y lograr una mayor temperatura, lo curioso es que este concepto físico puede funcionar de la manera inversa, aumentando la presión, podemos conseguir un aumento de temperatura.
En este caso, con la ayuda de bombas de compresión se consigue mayor presión en un líquido refrigerante, lo que provoca un aumento de la temperatura del líquido, que luego se utiliza para calentar las estancias o el agua sanitaria.
Asimismo, gracias a las propiedades térmicas del líquido, también podemos conseguir que se refrigere bajando la presión de este, todo esto en un circuito cerrado que no requiere de ningún mantenimiento, puesto que viene cerrado y nadie lo puede manipular.
Según los expertos, se trata de una tecnología muy limpia y versátil, ya que con un mismo aparato podremos conseguir enfriar o calentar el ambiente. El sistema es también muy eficiente debido a que consume menos energía de la que produce.
Objetivos comunitarios europeos
Este cambio hacia tecnologías más eficientes se hace necesario en el momento en el que la UE, mediante la directiva 2018/2001, apuesta por un aumento del 1,3% anual en tecnologías renovables en calefacción y refrigeración y un 1% en sistemas centralizados para evitar un daño mayor en la situación climática.
Dicha directiva pretende cambiar el parque inmobiliario actual hacia uno totalmente eficiente y respetable con el medio ambiente para así alcanzar el objetivo de conseguir edificaciones con una huella de carbono nula en 2050.